Hay momentos que se quedan grabados para siempre en la memoria de una comunidad… y este ha sido uno de ellos.
El Colegio Guadalajara del Sagrado Corazón celebró su 130 aniversario con una fiesta que estuvo llena de alegría, tradición y unión. Entre música, bailes, mariachi, risas y un ambiente familiar que llenó cada rincón, vivimos una jornada donde pasado y presente se encontraron para recordarnos el valor de nuestra historia.
Pero no fue solo un aniversario… fue una celebración doblemente especial.
El 20 de octubre, como cada año, honramos a Mater Admirabilis, nuestra guía de sencillez y fortaleza. En una emotiva celebración eucarística, elevamos nuestro agradecimiento por su compañía constante, esa presencia amorosa que ha acompañado al colegio desde sus primeros pasos hasta este 130° aniversario.
A lo largo de más de un siglo, Mater ha sido luz y refugio, inspiración silenciosa que ha guiado el corazón de generaciones enteras de estudiantes, familias y colaboradores.
Hoy seguimos confiando en esa luz que nos invita a vivir con fe, a caminar con alegría y a servir con amor.
Esta fiesta no solo celebró el tiempo transcurrido… celebró la vida compartida, la fe que nos sostiene, las generaciones que nos han formado, y los sueños que seguimos construyendo juntos.
A toda nuestra comunidad: gracias.
Gracias por ser parte de esta historia viva.
Gracias por su cariño, su entrega y su corazón.
Gracias por seguir impulsando la transformación social que nos inspira desde hace 130 años.
Aquí queda este video para recordar que, cuando caminamos juntos, la historia sigue viva… y el corazón del Colegio late más fuerte que nunca.





